Es difícil amarse a uno mismo, pero es muy fácil enamorarse de nuestro ADN.

El ADN está en el interior de nuestras células, somos nosotros. “Si él es hermoso, completo, poderoso, yo también lo soy”.

Durante años he hablado del Yo Superior y lo vi cómo algo alejado de mí que estaba en lo alto.

“Cuando descubrí que mi YO Superior, la parte más divina que Yo Soy, estaba en mis células, en la capa número 6 de mi ADN, empecé a creer más en mí misma, en mi intuición y en esa capacidad de comunicarme con el Campo y el espíritu de todo lo que es”.

Siempre me habían dicho que Dios estaba en todas las partes al mismo tiempo, aprendí a hablar con Dios como si fuese algo externo a mí, cuando conocí y me enamoré del ADN comencé a hablar también a mi Dios interior.

“Cuando descubrí que Dios habitaba en mi capa 12 del ADN me di cuenta de la grandiosidad del ser humano y que todavía muchas personas no habían tomado conciencia de su grandeza. El mundo mineral, vegetal y animal nos reconoce como ese Dios, pues ellos saben que habita en nuestro ADN. ¿Cómo es posible que nosotros no nos demos cuenta?

Cuando observé que mi familia del alma, mis seres queridos, mi padre que se había muerto habitaba en la fibra 2 de mi ADN, me hice increíblemente fuerte. Todos los que amaba estaban junto a mí, conmigo y su fortaleza y fuerza era la mía.

Cuando comprendí que el ADN contiene la información de todo lo que yo he sido, soy  y seré, de todos mis talentos del pasado, presente y futuro, de todo lo positivo que he vivido, entendí que podía quitar mis miedos en el cumplimiento de mis sueños.

Cuando entendí que mi salud, la capa de los milagros, número 9 del ADN se podía activar para sanarme, comprendí mi poder y que yo soy responsable de mi propia vida.

Cuando sentí el amor compasivo que alberga ADN en su capa 11, entendí que todos los seres humanos somos amor por naturaleza. Sólo tenemos que activar nuestro ADN.”

ACTIVACIÓN DEL ADN: Activar el ADN es aumentar la eficacia con la que el ADN se comunica con el cuerpo.

Genoma humano, opinión de la ciencia:

―El 4% del ADN tiene un código genético humano constituido por 23.000 genes, cada uno de ellos es la unidad hereditaria.

El ADN es como un bucle no una hebra (escaleras enroscadas) y la doble hélice sólo se ve cuando está desenmarañada en un microscopio.

―El 97% es “ADN basura” no codificado en proteínas. (PLANTILLA DEL DISEÑO MULTIDIMENSIONAL). La ciencia habla de que existe una interdimensionalidad dentro de nuestra estructura celular, un campo multidimensional alrededor del ADN, que es capaz de cambiar la materia en un experimento, es como si recibiese información de una fuente externa que le da instrucciones. El ADN tiene propiedades multidimensionales entre las que se incluye al menos 12 energías o capas.

Si el ADN es multidimensional nosotros también lo somos. Cada persona tiene un ADN personal, totalmente diferente y único.

El ADN nativo se encuentra en grupo con otros ADN, generando campos magnéticos que pasan corriente a otros ADN, que se entrelazan por todo el cuerpo, de forma que funcionan como un único ADN y generan una sola conciencia humana.

En el ADN está la conciencia espiritual y no en el cerebro. El ADN es inteligente, está hablando constantemente con las células dando instrucciones para todo el cuerpo. La conciencia activa todas las capas del ADN para que se haga el mejor trabajo. El ADN está predispuesto a ayudarnos a encontrar al creador que tenemos dentro.

El ADN toma lo multidimensional y lo convierte en información y luego en acción. El ADN espera señales tanto de la conciencia humana como de la propia memoria multidimensional para actuar.

Contienen una parte enorme de nuestra espiritualidad, registro de todo lo que hemos sido en el planeta, de nuestra relación con Gaia, de todo lo que hemos hecho y lo que hemos aprendido en cada vida.

Tiene conocimiento de lo que estamos haciendo y del propósito espiritual y hay que dar instrucciones al cuerpo para que tenga una direccionalidad. Es el maestro sincronizador del cuerpo humano.

El ADN no está esperando ser mejorado, sino dirigido y activado.

El ser humano nace con una activación del 30% de su ADN. Los maestros tenían el 100% de su ADN activo, por eso, su conexión con Dios era muy grande y se sentían Dios, emanaban y daban información de paz, amor y unidad. Ellos nacieron con el mismo ADN que nosotros, pero lo activaron al 100%.

Se pueden utilizar diferentes técnicas para activar el ADN:

• La conciencia,
• Meditación, Mindfulness, técnicas de respiración.
• Música, pintar, escribir o cualquier diseño creativo.
• Trabajos energéticos (Reiki, Sanergía, sanaciones, llama violeta…)
• Llama azul dorada.
• Palabra hablada: Afirmaciones, decretos, oraciones, plegarias, palabras, pensamientos…

Cuando trabajamos con el ADN estamos trabajando con las células del cuerpo, ya que el ADN está contenido en cada una de nuestras células, y lo único que hay que hacer es dar instrucciones a la estructura celular o al ADN o al a Yo Superior. Independientemente del método que utilicemos, el ADN sabe lo que estamos intentando hacer y es la consciencia del ADN la que decide activar las 12 capas.

No existe la capacidad de activar una sola capa, se activan todas multidimensionalmente.

• Intención de hablar al ADN.

• Pedir permiso, que se activa con la intención pura.

Cuando hablamos al ADN estamos dando permiso a que la fuente divina y toda nuestra familia del alma, así como los seres de luz nos ayuden. Siempre hay que pedir y recibir permiso.

• Necesita ser reconocido. Tener pleno conocimiento y plena conciencia de que el ADN tiene el potencial de funcionar mejor de lo que lo hace y que es fuente de información y la puerta a todo lo que es y existe, pudiendo modificar la química del cuerpo y acceder al ADN de otras vidas con mejor funcionamiento.
• Aumentar nuestra consciencia humana. Al aumentar nuestra vibración y despertar nuestra divinidad se activa el ADN.
• Obedece a tu intención, voz, pensamientos y palabras.

Es nuestra propia voz multidimensional la que da instrucciones a la parte cuántica de nuestro ADN. Y esto es lo que produce el cambio químico en el genoma tridimensional, pudiéndose eliminar incluso las enfermedades hereditarias. La ciencia ha descubierto que el ADN puede programarse mediante palabras y frecuencias. El ADN obedece a nuestros pensamientos, palabras, pero es muy importante utilizar la frecuencia adecuada.

• Tener frecuencia de amor o intención pura para hablar a las células.

Se debe trabajar desde esa espiritualidad interior y frecuencia del amor, para que la comunicación consciente con el ADN sea adecuada.

La ciencia está trabajando para investigar esta comunicación, en el futuro se descubrirá otros modos tecnológicos de comunicarse con el ADN.

• Acción: Hablar a las células dando instrucciones sobre lo que necesitamos. El ADN está siempre escuchando y conoce nuestra intención.
• Utilizar afirmaciones en nombre del “Yo Soy”, “Yo Superior”, “ADN”, “Espíritu” activa el ADN.

Hoy por hoy el ADN está constantemente escuchando lo que pensamos y sentimos y eso afecta a nuestra salud.

• Podemos dar instrucciones al ADN para que cambie la química del cuerpo y mejore nuestra salud.

Esto es lo que hacían los maestros dar instrucciones al cuerpo para crear milagros.

“Querido ADN activa mi sanación…”.

“Querido ADN, deseo controlar mis enfermedades y tener plena salud del cuerpo, tener una vida más larga y sana y joven”.

“Querido ADN, querido espíritu, revisa mi vida y cambia aquello que pueda ser mejorado”.

“Dadme lo que pueda asimilar en un proceso lento”.

• Podemos traer a esta vida los atributos de las vidas pasadas.

El ADN elige los atributos de la vida que sea más adecuados:

“Querida estructura celular, deseo tener los atributos que he ganado en lo que yo denomino mi pasado, que puedan aumentar la capacidad de vivir mi vida actual con mayor facilidad y gracia. Deseo reclamar aquello que pueda permitirme vivir más tiempo, hacer mejor mi trabajo y darme paz sobre las cosas que quiero hacer. Por eso deseo explorar el akasha que se encuentra en mi ADN personal”.

• Podemos cambiar los atributos de nuestra personalidad y elegir la energía personal que deseamos.

“Me gustaría acceder a aquella vida en la que sabía pintar, escribir, perdonar…en la que tenía paz, alegría…”.

• Podemos sanar el Akasha.

Podríamos acceder a nuestro registro Akásico y buscar el ADN más puro que hayamos tenido jamás, cogerlo y colocarlo sobre los atributos de nuestra salud actual, cambiando la información. Podemos cambiar cualquier atributo de nosotros mismos que deseen modificar (personalidad, fobias…).

“Me gustaría esto…, doy mi permiso para que se activen las energías que necesitan activarse en mi vida, para cumplir con los propósitos para los que vine. Quiero tener alegría en mi vida y encontrar la alegría en todo mi Akasha, porque me lo merezco y me lo he ganado. He tenido vidas positivas y alegres, así que quiero servirme de esa energía”.

“Querido ADN necesito autoestima, porque no tengo mucha…”.

“Reclamo el poder del creador que llevo dentro de mí, para vivir más tiempo, pensar equilibradamente, vencer el miedo, sanarme…”.

• Podemos deshacernos de los atributos kármicos.

Os animo a hacer esto, pues el karma es un proceso de aprendizaje muy lento y a largo plazo de muchas vidas. Con esta nueva energía se incita a decidir eliminar el karma, no más víctimas y total responsabilidad.

“Querido ADN, quiero salirme de cualquier situación kármica que haya podido generar en relación con…, quiero salirme de todo eso y vivir en paz y armonía con esta persona. Así es”.

• Podemos influir en los acontecimientos del planeta a través de nuestros pensamientos y palabras.

El Yo Superior actúa como una antena parabólica dentro de nuestro ADN y envía información multidimensional pudiendo incluso cambiar el clima o mejorar las situaciones planetarias o hacer sanaciones globales.

“Pido a mi presencia divina Yo Soy y a la presencia divina Yo Soy de (la persona)… para que active su proceso de sanación…”.

“Pido que se abra la conciencia en todos los seres humanos para crear la nueva tierra, el nuevo humano divino, lleno de amor compasivo y benevolencia”.

• Podemos transformar las creencias y emociones que nos afectan y nos limitan.

“Querido espíritu, querido ADN, querido Yo Superior, elimina aquellas creencias que me impiden avanzar en mi vida y todas aquellas emociones que me atrapan y me alteran, yo quiero ser libre de mis pensamientos y emociones y vivir en paz y armonía dando lo mejor de mí en mi trabajo, familia, amigos y en todo el planeta. Gracias. Hecho está”.

• Podemos activar los talentos y dones del pasado.

“Querido Yo Superior, en este momento de mi vida necesito paz, alegría, armonía… yo sé que en muchas ocasiones he disfrutado de estas experiencias, te pido que se hagan presentes en este momento en mi vida. Así es”.

“Querido ADN, necesito tener el talento para hacer… y pido que llegue a mi vida en este presente, en este aquí y ahora, en mi realidad física actual. Gracias”.

“Querido espíritu, desconozco cuales son mis necesidades en este momento, pero me abro a recibir los dones y talentos, fortalezas que yo he tenido en otras vidas, para conseguir avanzar y cumplir mi sueño de ser feliz. Gracias, Hecho está”.

• Podemos desarrollar capacidades del futuro en este presente, creando una personalidad completamente nueva.

“Querido ADN, yo sé que soy creador de mi realidad futura y creo para mi futuro las mejores herramientas para estar bien en este presente”.

“Querido ADN, te pido que aquellas cualidades y atributos de bienestar que voy a tener en el futuro, lleguen a este plano presente de mi vida ahora. Que mi conciencia amplificada del futuro sea mi realidad en este momento, para generarme mejor salud, mejor alimentación, para tener beneficios mentales, con mucha memoria y creatividad, para tener mucha paz y alegría, que las risas y sonrisas y logros de mi futuro lleguen a la velocidad de la luz a mi vida presente, ahora. Gracias. Hecho está”.

• Activar el ADN a través de la meditación utilizando La llama azul dorada:

La llama azul dorada es la frecuencia de energía más antigua de las almas, procede directamente de la energía del Padre y del Hijo para ayudar en este proceso evolutivo a personas de conciencia pura que deseen ayudar a despertar a la humanidad.

La energía de esta llama permite que el maestro interior brille con la frecuencia de luz de nuevo tiempo. Esta frecuencia de luz es muy elevada, te conectas con el Yo Superior interno Crístico en tu alma y se envía luz directamente a las células y ADN, poniéndose en marcha un proceso de autosanación y evolución en el amor incondicional imparable.

El ADN es la herramienta más importante que tenemos en este momento en esta vida y está esperando siempre ser activado.

Te invito a activar tu ADN e incrementar tu vibración utilizando esta poderosa llama azul dorada. Más información el el libro APRENDER A AMAR. Oliva Abad Santos.

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