Skip to main content

Etiqueta: coaching holistico transvibracional

CONVIERTETE EN COCREADOR

¿En qué nivel de creación estás?

Todos somos creadores de nuestra vida, pero realmente estás creando lo que deseas?

Cuanto mayor sea nuestro nivel de conciencia mayor es nuestra capacidad de manifestar lo que es mejor para nosotros  y para la humanidad.

Hay 3 niveles de  creación de  tu realidad:

1- AQUELLO QUE PENSAMOS LO CREAMOS. Ley del pensamiento positivo.

 Todos nuestros pensamientos conscientes o inconscientes, emociones y nuestro sistema de creencias  crea  nuestra realidad.

Tomar conciencia de lo que pensamos, decimos o sentimos y aprender a transformar lo negativo en positivo se convierte  en una necesidad para mejorar nuestra vida y ayudar a la humanidad.

En el libro  APRENDER A AMAR descubrirás varias herramientas que te guiarán  a crear desde la positividad.

2AQUELLO QUE CREEMOS LO CREAMOS. Ley de la Creación Consciente.

Es la capacidad que tenemos de manifestar conscientemente a través de la acción concentrativa en nuestros objetivos y sucesos, por medio de la mente multidimensional, desde la unidad con el TODO. Somos multidimensionales y operamos cósmicamente y lo que hacemos afecta a la totalidad.

En este nivel creamos desde el espíritu.

Todas las mañanas antes de levantarte cocrea tu día desde el espíritu-unidad concentrándote en lo que quieres crear.

Yo Soy creando mi nuevo día, hoy estaré en paz y amor, solucionaré todas aquellas dificultades que encuentre en el camino, mis relaciones serán satisfactorias y llenas de alegría, mi familia disfrutará conmigo y en todo momento sentiré a Dios dentro de mí”.

 

3- CREAMOS DESDE EL SABER. Ley de la convicción.

El saber es manifestar con convicción aquello que crees, pasamos del CREER al SABER que se manifestará con toda confianza. Hemos tenido muchas experiencias que nos han demostrado el poder creador, lo sabemos, por lo tanto, nuestra creación desde el saber es más efectiva y poderosa.

En este nivel de conciencia del SABER  somos  espíritu.

Te animo a hacer tu co-creación consciente:

“Respira profundamente, entra en ese estado de paz y serenidad, conéctate con tu sabiduría interior, con lo más puro de ti, haz tu petición de lo que quieres en tu vida y permítete expresar por qué y para qué lo deseas?, ¿Qué quieres experimentar con aquello que deseas?, ¿En qué medida lo que tu deseas puede ayudar a otros, al planeta al universo entero? Imagina, siente que en ese futuro próximo tienes ese potencial que puedes atraes a tu vida. La clave que te abre las puertas del flujo de la manifestación son tus emociones. Cuando vives un resultado con emoción eso que deseas llega a ti. Te invito a que anheles la emoción no el resultado que te traerá”.

 

“Oh Dios, desde mi presencia divina Yo Soy y desde lo más puro de mi divinidad, ahora, en este momento de silencio que estoy, en paz conmigo misma, pido amor, mucho amor, para que me pueda perdonar, disculpar y amar todos los días de mi vida; pido encontrar personas con las que mi relación amorosa y mi sentir esté lleno de amor; pido mucha paz en mi corazón, en mi cuerpo físico, en cada una de mis células, para poder estar equilibrada el mayor tiempo posible y poder tomar las mejores decisiones de mi vida; pido paciencia para esperar a que se den los procesos, los tiempos, las circunstancias adecuadas para mi mayor alto bien y el de la humanidad; pido que mi cuerpo físico rejuvenezca, esté lleno de salud física, se regeneran cada una de mis células, para encontrar la perfección para la que realmente me han diseñado; pido alegría en el vivir, sonrisas, que sucedan los sucesos que sean necesarios para que yo pueda reír por dentro y poder compartir todas las risas con otros; pido confianza en mí misma, sé que soy infinitamente más de lo que parezco, pido confianza en la vida, en que aparecerán los sucesos y personas adecuadas para mi ma­yor bien y el de los que me rodean; pido autoestima para que pueda sentir respeto por mí misma; pido amor compasivo para mí, que mi amor sea tan grande que pueda irradiarlo y expresarlo el mundo, especialmente a esos que me cuesta tanto amar, a esos que tengo al lado y a esos que me hayan podido herir en algún momento de mi vida; Padre me abro a ti, me abro a la divinidad que Soy, para poder obtener la mejor versión de mí misma que solo tú conoces, quiero descubrir todos esos talentos, todos los dones que yo tengo, para poderlos expresar en mí y poder ser un granito de arena que ayude a este planeta; Padre proporcióname todo aquello que necesito, para poder hacer el propósito de mi vida, las personas, los medios, los conocimientos necesarios para poder expresar lo que verdaderamente soy a este mundo; Padre haz que mi amor por ti cada día sea más inmenso, más puro, más limpio, que la conexión contigo sea tan grande que me sienta en unión con la naturaleza, con todos los elementos, con todos los humanos, conmigo misma, con la tierra, con el planeta entero. Yo permito que solo lo mejor llegue a mi vida y me reconozco merecedora de la plena abundancia en todos los aspectos de mi vida. Te doy las gracias Padre por todo lo que me das todos los días, gracias a la vida por todo lo que me entrega, doy las gracias a esos seres de luz, familia del alma que me acompaña siempre, a la divinidad que Yo Soy por ser lo que Soy. Así es”.

En el libro APRENDER A AMAR, trabajarás las 7 leyes del Kybalión y disfrutarás de los 5 audios meditativos que te ayudarán a integrar todo lo aprendido.

OLIVA ABAD SANTOS. Coaching TransVibracional. Déjate amar por los Seres de Luz.

RECUPERA TU PODER A TRAVÉS DEL PERDÓN

Perdonar es querer  dejar  de sufrir para vivir en paz y armonía con uno mismo y los demás.

El trabajo del perdón se consigue conectándonos con lo más sagrado que hay en nuestro interior, con el amor que somos

Muchos conflictos en nuestra vida se solucionarían a través del perdón, heridas del pasado, relaciones familiares, asuntos no terminados, enfermedades…

¿POR QUÉ ES IMPORTANTE PERDONAR Y PERDONARSE?

– Cuando perdono recupero la PAZ y ALEGRÍA.

– Recupero la salud mental y emocional.

– Me siento feliz, disfruto de la vida. PERDONAR ES LA CLAVE DE LA FELICIDAD,

– Recupero MI PODER PERSONAL, SOY LIBRE.

 

NO SE TRATA DE OLVIDAR, SINO QUE EL RECUERDO YA NO TE HAGA DAÑO

 

¿CUÁNDO SABEMOS QUE TENEMOS QUE PRACTICAR EL PERDÓN?

  • Cuando culpo a otros o me culpo a ti mismo.
  • Cuando juzgo a otros o me juzgo a ti mismo.
  • Cuando me altero de forma exagerada ante determinadas personas o situaciones.

Hay emociones profundas que esconden asuntos de nuestra infancia que deben ser perdonados. Situaciones aprendidas hasta los 7 años, muchas de ellas no las recordamos, pero se quedan grabados en nuestro inconsciente y permanecen como información y comportamientos en nuestra vida adulta, marcando el cómo nos afectan las situaciones en nuestra vida diaria.

 

¿CÓMO PRACTICAR EL PERDÓN?

Se ha demostrado que si estamos en frecuencia de amor podemos transformar los recuerdos en una experiencia menos dolorosa o incluso positiva, ya que se crean nuevas redes neuronales de ese acontecimiento y dejamos de sufrir.

 

  • LIBERANDO LAS EMOCIONES DE MIEDO, IRA Y TRISTEZA. Comenzando con las emociones del padre y luego nuestra madre, llenando de amor todos los recuerdos y generando una sanación cuántica de mi dolor transformándolo en amor y recuerdos no dolorosos para mi y todo mi árbol genealógico. (ver capítulo 8 y 12 del libro APRENDER A AMAR. Oliva Abad Santos)

 

  • CON LAS 5 REGLAS DEL PERDÓN DESDE TU CHACRA UNIFICADO

“Me permito entrar en mí para sanar lo que tenga que ser sanado, sólo me abro, no controlo, solo permito que lo que tenga que suceder suceda”.

 

1-Aceptar.Todo empieza en nuestra mente aceptándote a ti mismo y a los demás que sean como decidan ser, y aceptando que tengo un conflicto o desacuerdo que me está afectando.

 

“Acepto sentir lo que siento, lo abrazo sin juzgarlo”.

2-Responsabilizarnos de nuestro sentimiento de culpa, de sentirnos mal, de tener emociones negativas hacían ti o hacia esa persona o situación.

“Me responsabilizo de sentir lo que siento, lo abrazo sin juzgarlo. Dejo de ser víctima y me hago responsable de sentir esto, aunque no sepamos porqué, dejo de juzgar.

Me permito entrar en mi para sanar lo que tenga que ser sanado, yo no controlo nada, sólo me abro a sentir.

Ábrete a sentir lo que sientas y deja de pensar tanto y de dar vueltas a la cabeza.

De lo único que somos responsables es de apartarnos del amor y de la unidad. La responsabilidad no está en tu cuerpo, ni en tus creencias, está en no tener amor”.

3-Disculpar. Disculpo la situación, la persona y a mí mismo.

Disculpar es quitar la culpa al otro y a uno mismo. La mayor parte de nuestros actos son inconscientes y no hubiéramos querido hacerlos, representan nuestro dolor o heridas del pasado y salen a la luz en cualquier momento, son inconscientes y el inconsciente es inocente.

Disculpo al otro, tal vez no se da cuenta de lo que está haciendo o lo hace lo mejor que puede o tiene preocupaciones, problemas o su personalidad simplemente es así. Me disculpo a mí mismo por lo que me pudiese afectar personalmente, lo hago lo mejor que puedo”. Me molesta la situación, pero acepto a la persona, me acepto, recupero mi poder decidiendo disculpar.

4-Perdonar.  Perdono a la persona o situación, me perdono. Perdonar significa quiero dejar de sufrir por ese conflicto. Decido y elijo perdonar y honrar la situación, pues cada uno lo hace lo mejor que sabe, todo es inconsciente.

“Si hubiera algo o alguien que en el pasado me hirió consciente o inconscientemente, lo perdono y lo libero. Si he herido a algo o alguien en el pasado, consciente o inconscientemente, yo me perdono y me libero”.

5-Amar.  Mi mente se llena de pensamientos positivos y de energía de amor. Me conecto con el amor que hay dentro de mí, cambio mi vibración  de sufrimiento y dolor  por amor compasivo.

Llenar de amor desde tu centro de poder personal a través del chacra unificado.

Y surge a través del amor a uno mismo el amor a los demás. Donde aceptas al otro tal y como es, donde no hay juicio, no hay culpa, sino disculpa, donde hay perdón, donde honras al otro como es, donde lleno de amor al otro y la situación.

“Acepto la situación que estoy viviendo, me responsabilizo de vivirla con tanta intensidad aunque no sepa por qué, dejo de ser víctima de la situación y me disculpo y disculpo a la persona, lo hemos hecho lo mejor que hemos sabido, lo hemos hecho inconscientemente y el inconsciente es inocente, lo siento, perdón, no quiero sufrir más, quiero que se borre, cancele y elimine las memorias de dolor que tengo en relación a esa situación… o persona…, y en este momento lleno de amor todos esos recuerdos, trayendo a mi presente sólo lo bueno y las experiencias positivas vividas. Así es”.

“Que el Amor llene de luz todas las situaciones de tu vida, para que sean transformadas en momentos de paz, alegría y amor”, “Benevolencia para todos tus conflictos.”

 

  • PERDÓN CUÁNTICO

Ponte en contacto con tu Yo Superior, con el corazón y pregúntale:

“¿Qué creencia, emociones están impidiendo mi felicidad? ¿Qué sentimientos de culpabilidad están en tu inconsciente que te impiden perdonar o perdonarte?

Pide a tu yo Superior que te ayude a eliminar las emociones que tienes grabadas en tus memorias que son de dolor y te impiden perdonar a otros o a ti misma.

Espera que lleguen las respuestas. Te vienen imágenes, ten en cuenta las emociones asociadas y toma conciencia si hay culpabilidad.

Pido a mi Yo Superior que elimina de mis cuerpos energéticos todas las emanaciones de energía negativa en  forma de pensamiento o emociones negativos que están actualmente afectándome. Que disuelva este bloqueo en todos los planos, dimensiones y líneas temporales donde se encuentre manifestado, desde el punto y momento espaciotemporal en el cual se originó hasta este momento. Así es, hecho está. (3 veces).

 

  • Utiliza la LLAMA VIOLETA TRANSMUTADORA impregnada de amor para bendecir tu vida y traerte luz, comprensión, sabiduría, libertad, perfección y amor.

– Relájate, aquieta tu mente y cuerpo, y con toda la intensidad de tu Fe y Amor, llamar al Amado Maestro Saint Germain y pedirle que, desde Su Corazón, te irradie el Fuego Violeta, liberándote de todo lo que no te hace feliz.

–  Imaginas la «energía» Violeta envolviéndote, «transmutando» tus creaciones equivocadas y dejándote pleno de Luz. Luego, expándela a tu familia, hogar, negocios, intereses, haciendo brillar ese Fuego Bendito para que todo prospere en Armonía y Amor.

ORACIÓN DEL PERDÓN: Si hubiera algo o alguien que en el pasado me hirió consciente o inconscientemente, lo perdono y lo libero. Si he herido a algo o alguien en el pasado, consciente o inconscientemente yo me perdono y me libero.

 

  • HO’OPONOPONO.

El Ho’oponopono limpia, cancela, borra y libera pensamientos o creencia erróneas, a partir de las afirmaciones “LOSIENTO, PERDÓN, TE AMO, GRACIAS”, utilizadas desde la conexión con la pureza de tu niño interior.

Lo siento, te hace responsable 100% de todo lo que sucede en tu vida.

Perdón, da un sentido de arrepentimiento por tener esos pensamientos erróneos y creencias limitadas. Es no querer sufrir más por esa manera de ver las cosas.

Te amo, trasmuta la energía, bloqueos o vibración negativa en luz.

− Y gracias, cancela los recuerdos o memorias negativos de esa situación de dificultad.

 

Oliva Abad Santos

Coaching transvibracional

Maestra Holística

Autora de APRENDER A AMAR Y UN AÑO PARA SER.

¿Cómo resolver conflictos o dificultades?

 ¿Sientes que hay desacuerdos,  falta de apoyo en tus relaciones personales o profesionales?

La mayor parte de discusiones o desacuerdos son con las personas que más queremos, pues son con las que más nos relacionamos.

Los desacuerdos en las empresas o negocios son muchas veces originados por la falta de empatía de unos hacia a otros, ninguno de las dos partes abre la mente para ponerse en el lugar del otro, mientras están en ira y por tanto, defendiéndose, no pueden escuchar la otra parte.

La discusión siempre es una sin razón.

¿Cómo reaccionan las mayor parte de las personas ante un conflicto?

1-Huyen del problema: No quieren ver lo que les ocurre, no quieren pararse a pensar ni un solo segundo en su conflicto o dificultad. Resulta mucho más cómodo dejar este problema para mañana o dedicarse a hacer otras cosas, olvidarse de la situación, no prestar atención a este problema personal, familiar, laboral, colectivo….

2- Hablan del problemas a otros: Piensan que hablando y quejándose los problemas se resolverán. Y eso está muy lejos de la realidad.

Cuando hablas de esos problemas te desahogas, te encuentras muy a gusto, incluso puede que te relajes. Pero ese problema tiene tu sello, tu identidad y días después, semanas o meses vuelve a salir porque no está resuelto y vuelves a hacer lo mismo, hablar, quejarte y el problema sigue igual.

3-Esconden el problema:

  • Personas que ven el problema, pero dejan la solución para otro momento, demorándolo en el tiempo.
  • Personas que prefieren no reconocer que hay un problema y ponen la atención en otro sitio, pensando que de ese modo el problema se solucionará solo. Pero el problema aparecerá una y otra vez hasta que la tratemos desde la positividad y el amor.
  • Personas que reprimen los problemas  no los expresan a otros. Esa queja interior se va haciendo muy profunda, en muchos momentos ellos se sienten víctimas de una situación injusta, una vida injusta con ellos, decepcionados, dolidos con ellos mismos y con todo, sintiéndose en lo más profundo de ellos malheridos y maltratados por ellos, los demás o la sociedad. Ese pensamiento continuado genera una vibración que va a hacer que el cuerpo se desequilibre y enferme.

Cada persona tendrá reacciones diferentes ante las situaciones de dificultad o desacuerdos. El cómo reaccionamos ante los conflictos que tenemos con otros hablan de nosotros mismos. La solución para resolver nuestros bloqueos personales o conflictos con otros pasa por estar tranquilos, en equilibrio, empatizar, ponerse en el lugar del otro y enviar amor a esa situación de dificultad.

Te propongo esta herramienta:

TRANQUILIZARTE Y PONERTE EN EL LUGAR DEL OTRO

―Ir a un lugar tranquilo.

―Hacer unas respiraciones profundas con inspiración y espiración conscientes o respiración nasal alterna para equilibrar los hemisferios cerebrales y empezar a ver las cosas desde otra perspectiva.

Ir a tu centro de paz y observar por qué tienes ira, qué razones tienes y en el fondo qué necesitas y qué quieres conseguir.

―Desde tu centro ponerte en el lugar del otro, observar la situación desde su punto de vista y ver que realmente necesita la otra persona. Cuando la otra persona entiende que lo comprendes, tal vez esté dispuesta a escucharte.

―Cuando ya tienes la situación controlada puedes hablar desde el amor.

En la mayoría de los casos reaccionamos con ira por falta de amor a nosotros, y nos damos cuenta de que lo que necesitamos es que nos apoyen, y detrás de ese apoyo está la necesidad de que nos demuestren que nos quieren, que somos importante y necesarios.

La insatisfacción personal nos lleva a generarnos razones para discutir. Realmente es como si estuviésemos enfadados con nosotros mismos y buscásemos  alguien a quien echar la culpa de nuestro malestar. Cuando nos amamos podemos aceptarnos y aceptar a otros mejorando nuestras relaciones.

Detrás de toda discusión está la falta de amor a uno mismo y la necesidad del otro de ser amado.

Cuando empiezas a ver con una perspectiva más profunda te das cuenta de que no hay motivos de discusión, sino razones para amar.

Ver capítulo 8 del libro APRENDER A AMAR